Por Clementina Equihua Z.
Antes de que termine este siglo, las selvas tropicales estarán sujetas a condiciones climáticas que no han existido en la Tierra desde hace millones de años. Estos ecosistemas son de los que más especies albergan en el mundo y juegan un papel preponderante en la regulación del ciclo de carbono y del agua en el sistema climático.
El Dr. Richard T. Corlett de la Universidad Nacional de Singapore, publicó un trabajo en el número de noviembre de la revista Trends in Ecology and Evolution en el que revisa diversas investigaciones recientes enfocadas en entender el impacto que puede tener el cambio climático ocasionado por las actividades humanas sobre las selvas tropicales. De acuerdo con el autor este tipo de estudios tienen una sorprendente variedad de puntos de vista sobre la vulnerabilidad de uno de los ecosistemas más importantes del mundo ante el cambio climático y van desde poco preocupados por su bienestar hasta muy preocupados. Corlett aborda el tema del aumento de las temperaturas examinando la investigación que se ha hecho en pro y en contra de su alta vulnerabilidad.En su revisión, Corlett examina los trabajos que consideran el tema del aumento de las temperaturas desde el punto de vista en pro y en contra de su alta vulnerabilidad. Para el autor el aumento en las temperaturas de nuestro planeta definitivamente es una razón de preocupación para la conservación de las selvas tropicales y las especies que ahí viven. También hace notar que, dado que el cambio climático ya está encaminado, los investigadores no pueden esperar a entender mejor los posibles impactos que ocasionen las mayores temperaturas para proponer maneras de contribuir a la adaptación de las especies.
En su investigación R. Corlett hace recomendaciones para el futuro de la investigación en el tema, sin embargo señala que es importante dar prioridad a temas que ayuden a entender cómo es que las especies toleran y se aclimatan a estos cambios, así como la manera en que se puede alterar el funcionamiento de estos ecosistemas.