Gerardo Ceballos González
Al norte de Perú está el Santuario Nacional Tabaconas – Namballe. El Santuario se ubica en la vertiente del Atlántico de los Andes Peruanos, cerca de la frontera con Ecuador. Llegar a esta región implica un trayecto en carretera de 18 horas que va desde la selva tropical hasta los páramos andinos. Durante el septiembre de 2011, asistí con el Dr. Horacio Zeballos del Museo de Historia Natural de Arequipa, Perú a impartir el 1er Curso Internacional de Biología de la Conservación. Parte de nuestro trabajo consistía en llevar a cabo inventarios biológicos en el Santuario.
Para llegar a la Estación Biológica Chichilapa del Santuario Tabaconas – Namballe hay que caminar más de dos horas por veredas y hermosos paisajes. Acompañado por mis colegas A. García, J. Pacheco y L. Martínez, ya muy cerca de la estación nos sorprendió ver, junto al camino, una zorra de color gris, la cual representaría el registro más sureño de zorra en América, pero más bien es probable que sea una nueva especie.
Tesoro de biodiversidad desconocida
El resto de nuestra estancia acabó por hacernos ver que el Santuario es un paraíso de biodiversidad desconocida. Oculto en medio de sus bosques de neblina y pastizales alpinos, hasta ahorita hemos encontrado por lo menos, ocho especies nuevas de mamíferos y tres de anfibios. Este es el descubrimiento de diversidad biológica más importante en los últimos años porque todas estas especies de animales fueron encontradas en un área muy pequeña.
Las nuevas especies de mamíferos incluyen una musaraña, un mono nocturno, un enigmático puerco espín, un marsupial, varios roedores, estamos casi seguros que una de zorra gris y, hace unos años se descubrió una nueva especie de olingo. Las ranas son la recientemente descrita, Pristimantis bustamante y otras dos especies más del mismo género. Es muy probable que más especies nuevas de vertebrados sean descubiertas en las áreas inexploradas del Santuario. Actualmente ¿diversos especialistas? están describiendo científicamente a las nuevas especies.
Años antes, en 2009, Zeballos y su equipo incluyendo a K. Pino, A. Pari, C. Medina, J. C. Chaparro, J. Ochoa y R. Gutiérrez exploraron otros dos sitios del Santuario: Las Lagunas Arrebiatadas en los páramos y los bosques montanos de Miraflores. Este trabajo fue apoyado por The Nature Consulting SAC, el Santuario Nacional Tabaconas - Namballe y la Corporación Belga. Quedaron sumamente sorprendidos con el número de nuevas especies que observaron ahí. Zeballos, uno de los más prestigiados mastozoólogos en Perú y Curador del Departamento de Mastozoología del Museo de Arequipa, nos contó que “estaba totalmente perplejo cuando descubrí entre los pequeños mamíferos una nueva especie de marsupial Sudamericano del Orden Paucituberculata, mucho más grande que las tres especies previamente conocidas”. Zeballos opina que aún quedan muchas especies de vertebrados por descubrir, no sólo en el Santuario, sino en todo Perú, donde realiza muestreos e inventarios activamente en nuevas áreas prometedoras.
El futuro del Santuario Tabaconas – Namballe
El Santuario Tabaconas – Namballe tiene una superficie de 32,000 hectáreas y varía en altitud desde los 1800 a 3200 m. Los principales tipos de vegetación incluyen bosque montano tropical, bosque pluvial tropical y paramos andinos. La diversidad del Santuario es impresionante e incluye 85 especies of mamíferos, 326 de aves, y 23 de reptiles y anfibios. Además, protege especies en riesgo como el tapir de montaña y el oso de anteojos. Sin embargo, la deforestación fuera del Santuario es intensa. A largo plazo, la cacería y la minería ilegal son las principales amenazas para la conservación del Santuario.
En los últimos quince años se han descrito al menos 500 especies nuevas de mamíferos en el mundo. Tabaconas – Namballe debe ser uno de los diez sitios más importantes para la estrategia cero extinciones del planeta, es decir, son áreas críticas para la conservación de especies encontradas exclusivamente ahí. Sólo otros sitios en México, Madagascar y Papua Nueva Guinea tienen un número similar de especies microendémicas y todos ellos pertenecen a esta estrategia. La conservación de este nuevo paraíso de biodiversidad oculta debe ser de prioridad para Perú y el mundo.