Las pitones invasoras y el futuro extraño e incierto de los Everglades de Florida

Brandon Keim
Traducción de: Michel Martínez
Publicado originalmente el 02 de febrero de 2017 en Anthropocene Daily Science

Los Everglades de Florida son una de las maravillas biológicas de la Tierra, un gran río que se mueve lentamente en cuyos pantanos viven —incluso en esta época tardía, con agua desviada, contaminación inyectada y el desarrollo humano que destruye paulatinamente— una variedad maravillosa y singular de criaturas. No obstante, los Everglades están atravesando una dramática alteración ecológica. Al mismo tiempo, son el hogar de un nuevo superdepredador: las pitones birmanos.
         Descendientes de mascotas que escaparon o fueron abandonadas, las pitones establecieron una población reproductora a finales del siglo XX. Sus hábitos depredadores son el material de una leyenda viral (Google “Una pitón explota después de comer un caimán”) y un problema de preservación, con el que los investigadores han documentado descensos dramáticos de mamíferos en donde las pitones han proliferado. En esas áreas, criaturas que alguna vez fueron comunes, como los mapaches, las zarigüeyas y los venados cola blanca, ya casi están extirpados.
         ¿Entonces qué sigue? Esa es la gran pregunta y el tema de una nueva investigación del biólogo John Willson de la Universidad de Arkansas, en el Journal of Applied Ecology. Con curiosidad acerca del futuro del ecosistema regulado por las pitones, Willson excavó nidos artificiales de tortugas dentro y fuera de área de distribución de las pitones. Después usó cámaras con detección de movimiento para vigilar la depredación del nido. (En lugar de huevos de tortuga, los nidos de Willson contenían huevos de codorniz).
         Donde las pitones prevalecieron, los nidos fueron menos alterados, como se esperaba ante la casi ausencia de mapaches y zarigüeyas a los que les encantan los huevos. Esto sugiere un futuro abundante de tortugas para los Everglades, y también es representativo de las consecuencias indirectas efecto domino del aumento de las pitones.
         Willson explica que “es probable que las pitones estén teniendo un efecto positivo indirecto y fuerte en el éxito de la anidación de las tortugas en el sur de Florida, y quizás también efectos indirectos positivos en la selección de otras especies anidadoras pequeñas en los Everglades, como los pájaros cantores que anidan en el suelo, las lagartijas, las tortugas de mar y las serpientes ovíparas”. Sin embargo, no todas son buenas noticias para los anidadores. Willson señala que recientemente se han documentado pitones comiendo los huevos de especies más grandes, incluyendo gallinas de Guinea y aves gruiformes llamadas Limpkin.
         Mientras unas poblaciones se expanden y otras se contraen, sus roles ecológicos también cambiarán. Debido a la importancia de los animales como dispersadores de semillas, por ejemplo, ciertas poblaciones de plantas también podrían expandirse y contraerse y ese principio puede aplicarse en la infinidad de contextos de cada historia de vida de las especies. En conjunto, Willson anuncia que se pueden esperar cambios en “la composición o la estructura de la vegetación, las dinámicas de los nutrientes, la estructura de la red trófica o los servicios de los ecosistemas”. El mismo tejido de los Everglades podría reconfigurarse.
         ¿Qué hacer? Los intentos de matar a las pitones hasta ahora no han tenido éxito. Aunque son grandes, las serpientes son notablemente buenas para esconderse y además se reproducen con rapidez. Con un poco de suerte, los animales de los Everglades simplemente aprenderán a evadirlas, a la larga repercutiendo en nuevas especies inteligentes; Willson explica que hay “otros casos de especies invasoras donde las especies han aprendido o desarrollado respuestas que les permiten coexistir, aunque hasta ahora no hay información que indique que esto está pasando en Florida”.
         En cambio, tal vez la gente podría hacer la paz incorporando, o al menos aceptando, los ecosistemas de los Everglades con las pitones Burmes como un super-depredador y especie clave. Debido a la falta de una solución fácil, podría plantearse tal caso; sin embargo, argumenta Willson: “el grado de descenso de los mamíferos es problemático, y la desaparición casi completa de la mayoría de los mamíferos no me parece “un nuevo equilibrio” al que deberíamos aspirar, aunque me gusta la idea de que haya más tortugas”.

Fuente

Willson, J.D. Indirect effects of invasive Burmese pythons on ecosystems in southern Florida. Journal of Applied Ecology, 2017. DOI: 10.1111/1365-2664.12844

Versión en inglés: Invading pythons and the weird, uncertain future of the Florida Everglades

Colaboración con la revista Anthropocene de Future Earth, EUA.

Imagen: an Athlete Wrestling with a Python, via Flickr